Osmosis inversa industrial
Osmosis inversa industrial
La industria para sus procesos productivos necesita controlar la cantidad de sales que contienen sus aguas. Mediante la aplicación de membranas de ósmosis inversa es posible separar iones del agua de forma selectiva.
En IQD podemos diseñar, a partir de un análisis de sales, la configuración que garantice la calidad de agua requerida, consumo energético, rendimiento hidráulico y sistema de limpieza que se necesite para cada caso en particular.
Cuando una industria alimentaria utiliza agua de pozo o el agua de red no tiene la calidad requerida, necesita tratarla, para que cumpla el RD 140/2003, por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad del agua de consumo humano, y además necesita conseguir unas propiedades organolépticas adecuadas.
En estos casos, para el diseño de la unidad de ósmosis inversa es muy importante la etapa de pretratamiento, que consistirá en la filtración del agua para eliminar tierras, arcillas y sólidos presentes, desinfección para evitar la contaminación microbiana de las membranas y control de pH para evitar la precipitación de sales en la membrana. Estas instalaciones de ósmosis deben incluir siempre sistemas de autolimpieza CIP rápidos y eficientes, por lo que será necesario instalar sensores, medidores y controladores para automatizar el proceso.
Un alto rendimiento hidráulico, un bajo consumo energético, la trazabilidad en la eliminación de sales y la seguridad de la calidad microbiológica de las aguas generadas son las claves del proceso.
En el caso en que la industria requiera desinfecciones rápidas o esterilización completa de la planta, podemos diseñar y construir plantas de ósmosis inversa sanitizables por temperatura, hay que utilizar porta membranas de acero inoxidable y membranas, juntas y accesorios compatibles con un tratamiento térmico a 80ºC.
Cuando es necesario una desmineralización completa con conductividades de 1 – 0,01 µS/cm, diseñamos plantas de ósmosis en configuración de dos pasos, seguida de un intercambio iónico para alcanzar el objetivo.
El agua de aporte a calderas y torres de refrigeración debe contener la menor cantidad posible de calcio, magnesio y otras sales para evitar la precipitación e incrustaciones. El tratamiento de estas aguas mediante ósmosis inversa permite alimentar a estos procesos con una cantidad muy baja y controlada de sales, minimizando la posibilidad de incrustación, permitiendo aumentar el número de ciclos de concentración del sistema, minimizando las purgas y la dosificación de químicos. Estas plantas las diseñamos en configuración de dos etapas para tener un alto rendimiento hidráulico y un bajo consumo energético.
Cuando es necesario eliminar específicamente algún ión, nitratos, boro, arsénico, etc. podemos utilizar membranas selectivas a éstos, y calcular y diseñar instalaciones para cumplir con las especificaciones del cliente. En la actualidad, existe una gran variedad de membranas selectivas, en caso de no estar disponible la membrana adecuada para un ión determinado, la estrategia es la desmineralización completa de las aguas y posterior re-mineralización.
Cuando tenemos aguas depuradas completamente regeneradas y necesitamos bajar la conductividad para la reutilización de parte de esta agua, podemos utilizar membranas especiales de ósmosis inversa, en estos casos es muy importante que las aguas depuradas provengan de un biorreactor MBR o de un tratamiento convencional con tratamiento terciario, que garantice una DQO < 20 mg/l y estén completamente desinfectadas.
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